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jueves, 21 de noviembre de 2013
MIOMAS UTERINOS, UNA OPCIÓN NATURAL
Los miomas son casi siempre benignos y no cancerosos, incluso si tienen formas o patrones de reproducción celular anormales. El cáncer de útero casi siempre se desarrolla en el revestimiento del útero (cáncer de endometrio); sólo en casos poco frecuentes (generalmente en menos del 1% de los miomas) se da como resultado de una alteración maligna en un mioma (leiomiosarcoma). No obstante, los miomas que crecen rápidamente en una mujer joven, o incluso los miomas que crecen despacio en una mujer menopáusica, requieren una evaluación quirúrgica para descartar su carácter maligno. Los leiomiomas benignos metastizantes son un trastorno muy poco frecuente en que células de los miomas, que no son cancerosos, sino que son tumores benignos, se extienden a otras localizaciones, habitualmente los pulmones.
Aquí les dejo un artículo publicado por los Biólogos Miguel Ángel Gutiérrez Domínguez y Yolanda Betancourt Aguilar, representantes del Jardín Botánico Universitario, Facultad de Agrobiología
Universidad Autónoma de Tlaxcala, donde recomiendan una TISANA para lograr la disminución y, en muchos casos, la total desaparición de los miomas uterinos.
INTRODUCCIÓN
Son tumores benignos, no cancerosos que crecen a expensas de la capa muscular del útero llamada miometrio. También son llamados leiomiomas, fibromas, fibroides o fibromiomas y son secundarios al crecimiento anormal de un grupo de células de la pared uterina. El útero está formado por tres capas: la interna que lo recubre se llama endometrio, y es la que se desprende durante la menstruación y en la que anidan los óvulos fecundados; la media se compone de músculo liso y es la que genera las contracciones durante el parto, y la más externa es una membrana serosa (provista de fluido transparente). En cada una de éstas pueden desarrollarse miomas; así, cuando se manifiestan en la parte interna reciben el nombre de submucosos, en la media son denominados intramurales y en la externa subserosos.
Pueden crecer por efecto de los tratamientos de reemplazo hormonal que los ginecólogos prescriben para la menopausia y otras condiciones de la mujer.
El tamaño suele variar, pueden ser muy pequeños o llegar a tener un tamaño que obligue al útero a abarcar toda la pelvis y la parte baja del abdomen. Pueden presentarse de forma independiente o en forma de racimos.
Este problema es relativamente frecuente y se considera que más o menos una de tres mujeres ente los 35 y 55 años, tienen un mioma, que en otros términos, es un útero de tamaño más grande que el normal.
El porqué unas mujeres desarrollan miomas y otras no, parece que depende de una predisposición genética y de tener un útero que es más sensible a la acción de los estrógenos.
Entre las mujeres de mayor riesgo están las que tienen sobre peso u obesidad, ya que el exceso de grasa condiciona los niveles de estrógenos y con ello se favorece la aparición de los miomas.
SÍNTOMAS
- Llenura o gases abdominales
- Sangrado entre períodos o sangrado muy prolongado con períodos
- Aumento de la polaquiuria
- Sangrado menstrual abundante (menorragia), a veces con el paso de coágulos de sangre
- Calambres pélvicos o dolor con los períodos
- Sensación de llenura o presión en la parte baja del abdomen
- Dolor repentino e intenso debido a un mioma pediculado
- Dolor durante las relaciones sexuales
- Anemia ocasionada por la pérdida de sangre.
Cuando los miomas crecen mucho, y debido a la compresión que ocasionan, pueden ocasionar:
- Problemas urinarios con dificultad, incontinencia por la presión o dolor.
- Estreñimiento crónico.
- Hemorroides.
Los miomas ocupan una de las causas principales de infertilidad o esterilidad, así como de abortos espontáneos, motivo por el que se acude a consulta médica y se descubre el problema.
Se desconoce la causa de los miomas en el útero. Sin embargo, como ya se decía anteriormente, el crecimiento de los miomas uterinos parece depender de la hormona estrógeno. En tanto una mujer esté menstruando, los miomas probablemente seguirán creciendo, por lo general de manera lenta.
Al dejar de reglar, con el climaterio o menopausia, los miomas se reabsorben generalmente.
Los miomas uterinos pueden ser tan diminutos que puede ser necesario un microscopio para observarlos. Sin embargo, también pueden crecer con un gran tamaño, pueden llenar todo el útero y pesar varias libras. Aunque es posible que sólo se desarrolle un mioma uterino, generalmente hay más de uno.
Algunas veces, un mioma uterino cuelga de un tallo largo, que está adherido al exterior del útero y se denomina mioma pediculado.
TRATAMIENTO EN LA MEDICINA ALÓPATA
El tratamiento depende de diversos factores, como:
- Edad
- Salud general
- Gravedad de los síntomas
- Tipo de miomas
- Si está en embarazo
- Si desea tener hijos en el futuro
Algunas mujeres simplemente pueden necesitar exámenes pélvicos o ecografías de vez en cuando para vigilar el crecimiento del mioma.
La cirugía y los procedimientos empleados para tratar los miomas abarcan:
- Extirpación histeroscópica de los miomas: este procedimiento ambulatorio puede ser necesario para mujeres con miomas que crecen dentro de la cavidad uterina. En este procedimiento, se inserta una pequeña cámara e instrumentos a través del cuello uterino dentro del útero para retirar los miomas.
- Embolización de la arteria uterina: este procedimiento detiene el suministro de sangre al mioma, haciendo que muera y se encoja. Los efectos a largo plazo de este procedimiento aún se desconocen y la seguridad de un embarazo después de la intervención es una preocupación.
- Miomectomía: con esta cirugía se extirpan los miomas y, generalmente, es el procedimiento elegido para las mujeres que desean tener hijos, ya que por lo general se puede preservar la capacidad de procrear. Otra de las ventajas de la miomectomía es que controla el dolor o el sangrado excesivo que experimentan algunas mujeres afectadas por dichos miomas uterinos. Se pueden desarrollar más miomas después de la miomectomía.
- Histerectomía: esta cirugía invasiva puede ser una opción si los medicamentos no funcionan y otras cirugías y procedimientos no son una opción.
TRATAMIENTOS CON PLANTAS MEDICINALES
Para su tratamiento, los ginecólogos además de la cirugía tradicionalmente ofrecen hormonas sintéticas, del tipo progestágenos, que logran solo una mínima mejoría al mismo tiempo que producen numerosos efectos secundarios adversos, tales como: aumento de peso y de la tensión arterial, depresión, caída del cabello, infartos cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
Las mujeres que no mejoran con esos tratamientos, que son la mayoría, son llevadas a quirófano para la extracción, bajo anestesia general, del tumor y en muchos casos del útero en su totalidad, por lo que nunca más podrán tener hijos.
Estos agresivos tratamientos químicos y quirúrgicos pueden evitarse con la adecuada utilización de plantas medicinales que logran la disminución y, en muchos casos, la total desaparición de los miomas, sin causar efectos secundarios adversos y manteniendo la posibilidad de procreación.
COMPLICACIONES
Los miomas pueden ocasionar esterilidad, y pueden provocar igualmente un parto prematuro.
El dolor severo o el sangrado excesivo causado con miomas uterinos puede requerir una cirugía urgente. En raras ocasiones, se pueden presentar cambios cancerosos, los cuales generalmente ocurren después de la menopausia.
INGREDIENTES
1 cucharada de uña de gato peruana (Uncaria tomentosa)
1 cucharada de hojas de té verde (Camellia sinensis)
1 cucharada de partes aéreas de onagra o linda tarde (Oenothera biennis)
1 cucharada de kalanchoe (Kalanchoe spp.)
1 cucharada de flores de árnica mexicana (Heterotheca inuloides)
1 cucharada de corteza de cuachalalate (Amphypteringium adstringens)
½ cucharada de damiana de California (Turnera diffusa var. aphrodisiaca)
3 cápsulas de vitamina E-500
1 litro de agua
UTENSILIOS
1 cuchara sopera de acero inoxidable
1 cuchillo de cocina
1 coladera de plástico
1 toallita de papel o tela para limpiar la mesa
1 papel filtro para cafetera
1 taza o tazón medidor de vidrio
1 pocillo o recipiente de peltre con tapa
FORMA DE PREPARACIÓN
1. Trocear y desinfectar todas las plantas
2. Poner el pocillo con el agua, la uña de gato y el cuachalalate en la estufa
3. Al hervir, añadir las demás plantas, bajar la flama y tapar contando 10 minutos
4. Colar y entibiar
FORMA DE EMPLEO Y DOSIFICACIÓN
Tomar una taza de la tisana con una cápsula de vitamina E antes de los alimentos por quince días seguidos y tres de descanso hasta ver resultados satisfactorios.
RECOMENDACIONES
Eliminar o disminuir drásticamente de la dieta la sal, café, carnes rojas, refrescos, harinas blancas, el azúcar refinado, alimentos grasosos, mariscos y comidas procesadas así como sustancias irritantes como alcohol y chile. Disminuir los lácteos y sus derivados de la dieta debido a que estos desequilibran las hormonas femeninas. Garantizar un buen nivel de hierro, ácido fólico y vitamina B12 para no caer en la anemia.
PRECAUCIONES O CONTRAINDICACIONES
La infusión herbal de este tratamiento no se puede consumir durante el embarazo o la lactancia. Consulte a su orientador herbolario o médico naturista. En caso de irritación o alguna otra molestia suspenderla inmediatamente.
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