Las estrías son defectos de la piel que se manifiestan como líneas o bandas blancas que se producen cuando una persona crece, sufre aumentos de peso bruscos o padece ciertos tipos de enfermedades relacionadas con los niveles hormonales.
Licuar 2 cucharadas de hojas de diente de león, 1 cucharada de aceite de almendra, 2 cucharadas de aceite de rosa mosqueta (rico en aceites grasos que revitalizan las células de las capas interiores), 1 penca de aloe vera o sábila (sólo la pulpa) y media taza de harina de avena durante algunos segundos. Aplicar esta preparación sobre el área afectada mediante suaves masajes circulares. Dejar actuar unos minutos y enjuagar con agua tibia.
Mezclar 2 cucharadas de yoghurt natural, 1 de levadura de cerveza, 1 cucharadita de aceite de zanahoria y 1/2 cucharadita de miel. Aplicar y dejar puesto durante 15 minutos.
Extender una cucharadita de aceite de sésamo sobre el área afectada por las estrías después del baño
Otra opción es el tratamiento con láser si deseas que mejore la apariencia de las estrías después del parto. De acuerdo con la Sociedad Estadounidense de Cirugía Dermatológica, un cirujano puede utilizar distintos tipos de láser según el color de las estrías.
Existe un tipo que reduce el color de las estrías oscuras y otro que estimula la producción de células de pigmentación en estrías que ya han perdido color.
Hay un nuevo tipo de tratamiento con láser que puede utilizarse para estimular la producción de colágeno y ayudar a recuperar la elasticidad de la piel en estrías hundidas.
Es muy probable que tu plan de seguro médico no cubra estos tratamientos estéticos. Por lo tanto, si eliges esta opción, seguramente tendrás que pagar de tu bolsillo la consulta y cualquier tratamiento que realices.