El test de los árboles de navidad.

El test de los árboles de navidad.
En muchos países se acostumbra a usar el árbol de navidad para anunciar que esta próxima la llegada de la nochebuena, tiempo de familia, unión, amor y bondad. Lo realmente interesante es que tu tipo de árbol de navidad favorito podría reflejar aspectos importantes de tu vida y tu personalidad.

Observa los árboles de navidad y elige inmediatamente tu favorito. A continuación descubre su significado.

1. Brillante y excepcional: Te caracterizas por ser una persona que avanza con decisión y firmeza hacia aquello que quiere en la vida. Te preocupas mucho por la imagen que proyectas tanto a nivel personal, como profesional, y por esta razón es muy probable que pongas mucho peso y mucha presión en tu cotidianidad. Recuerda que el amor y el aprecio verdadero lo obtienes de aquellas personas que te quieren por lo que eres y no por lo que tienes. Tienes muchos talentos y habilidades maravillosas, vive tu vida con calma y felicidad, trabaja con amor y responsabilidad, respetando tus limites (tu sabes cuales son) y fluyendo con la vida. De este modo tu vida será mucho más tranquila, plena y sin duda más feliz.

2. Elegante y sofisticada: Eres una persona responsable, ambiciosa y organizada, que riges tu vida bajo la premisa que menos es más. Tus acciones son sencillas, silenciosas, pero con un gran impacto en tu vida y en tu mundo. Te gusta hacer las cosas a tu manera y que al final, sean los resultados los que hablen de tu talento. Tu principal reto es recordar que el odio, la envidia y el rencor son cadenas que impiden avanzar a aquel que las lleva consigo, por eso, no te dejes afectar por los sentimientos negativos de otras personas hacia ti, y por el contrario, haz que el amor y la bondad sean los motores que le den más impulso a tu vida y a tus sueños.

3. Amorosa y justa: Te caracterizas por ser una persona llena de amor, bondad y un interés real por las demás personas. Te gusta mantener la paz y la tranquilidad en tu vida y en tu entorno, y por esta razón eres una gran mediadora en conflictos y malos entendidos. Por tu tendencia natural hacia la calma y la tranquilidad es posible que intentes pasar desapercibida y que por esta razón seas un poco tímida. Recuerda que tienes cosas maravillosas que ofrecerle al mundo, del mismo modo en que el mundo está lleno de personas maravillosas con cosas que ofrecerte a ti. Revisa que tan altas tienes tus barreras hacia el mundo y las demás personas y aprende a confiar e involucrarte un poco más. Veras como tu vida se llena de momentos y personas maravillosas que le aportaran más sentido a tu vida.

4. Creativa y única: Te caracterizas por ser una persona muy creativa y perceptiva, con un estilo propio y muy bien definido y que quiere llenar su vida de gracia y cosas bellas. Tienes unos niveles de sensibilidad muy elevados, lo cual te hace generar mucha empatía con las demás personas (algunas veces convirtiéndote en confidente) y también experimentar importantes altibajos emocionales. Tu principal reto es reconocer tu tendencia a cambiar de emociones con mucha facilidad y a evitar que esos cambios de emociones afecten tu relación los demás. Recuerda que tu mundo está lleno de personas que te quieren, te apoyan y que quieren estar para ti de muchas maneras, se prudente con tus gestos y tus palabras cuando te sientas disgustada, pues muchas veces en medio de tu enojo dices cosas que realmente no sientes o nunca quisiste decir.

5. Analítica y metódica: Tu vida transcurre en una constante búsqueda de información. Te gusta estar informado acerca de muchas cosas (el mundo, el deporte, la tecnología, la moda, etc) y siempre quieres tener un dato interesante que aportar o algo divertido para decir. Cuando estas pleno y tranquilo tienes una gran alegría capaz de contagiar a los demás, pero cuando estas en situaciones de estrés te conviertes en una persona impetuosa e impositiva. Tu principal reto es controlar la intensidad de tus enojos, pues los disgustos pueden ser temporales, pero las palabras que dices o las cosas que haces quedan para siempre. Permite que sea tu inteligencia y capacidad de discernimiento quienes orienten tus acciones y tus palabras.

6. Optimista y alegre: Te caracterizas por ser una persona absolutamente entusiasta y que tiene la capacidad de siempre ver el lado bueno de las cosas. Tu optimismo es real y tiene la capacidad de contagiar al mundo. Tienes una mente muy rápida y ágil, que te permite encontrar soluciones creativas y sencillas a problemas que parecen difíciles y que siempre te permite obtener todo aquello que deseas. También puedes llegar a ser muy impulsivo y es justamente ahí donde radica tu gran reto. Vives tu vida de manera muy intensa y muy orientada hacia el futuro (por lo cual podrías experimentar mucha ansiedad por los días por venir). Un poco más de calma y de vivir intensamente el presente podría hacer más real y significativa tu alegría y te permitiría administrar mejor tu energía y tus recursos.

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REFLEXIÓN DEL DÍA

El huérfano

Dos misioneros recibieron una invitación del Departamento de Educación de Rusia en la cual se les pedía que se encargaran de enseñar sobre ética y valores morales basados en principios bíblicos, en sus escuelas públicas.
También debían transmitir sus enseñanzas en prisiones, hospitales, departamento de bomberos, policía y orfanatos.
Todo transcurría de acuerdo a lo planificado, hasta que fueron al orfanato de la ciudad. Entre niños y niñas sumaban unos cien, estos habían sido abandonados, abusados y dejados en manos del Estado.
Se acercaban las fiestas navideñas y aquellos niños del orfanato iban a escuchar por primera vez lo que significaba la Navidad.
Les contaron la historia de José y María llegando a Belén; que no encontraron lugar en las posadas, por lo que debieron ir a un establo, donde finalmente el niño Jesús nació y fue puesto en un pesebre.
Mientras escuchaban la historia, los chicos y los empleados del orfanato no podían contener su emoción y asombro, algunos estaban sentados al borde de la silla tratando de captar cada palabra.
Al terminar de contar la historia, les dieron a los chicos unos pequeños trozos de cartón para que hicieran un pesebre. A cada uno de los chicos se le entregó material, papel de colores y todo lo necesario para realizar el trabajo, y ellos siguiendo las instrucciones, cortaron y doblaron el papel cuidadosamente colocando las tiras para simular la paja.
Con unos pequeños recortes de tela de un viejo vestido que una señora había olvidado, se hizo la manta para el bebé.
De un fieltro marrón que los misioneros habían llevado, recortaron las figuras de los pastores que visitaron al niño Jesús y de todos los que formaban parte de la escena.
Mientras los niños estaban atareados armando sus pesebres, uno de los misioneros caminaba entre ellos para ver si necesitaban alguna ayuda.
Todo estaba bien hasta que llegué donde el pequeño Yakim estaba sentado, mirando con gran emoción su pesebre terminado. Parecía tener unos seis años de edad.
Cuando miré el pesebre quedé sorprendido al ver que no había un niño dentro de él, sino dos.
Llamé rápidamente al traductor para que le preguntara por qué había dos bebés en el pesebre.
Yakim cruzó sus brazos y observando el pesebre comenzó a relatar la historia muy seriamente, por ser el relato de un niño que había escuchado por primera vez la historia de Navidad, la descripción era extraordinaria, pero lo sorprendente fue cuando comenzó a contarnos la parte donde María colocaba al bebé en el pesebre.
Fue en ese momento cuando aproveché y le pregunté: -¿Quien es el otro bebe que esta junto a Jesús?
Yakim, con absoluta seriedad e imaginación, empezó a explicarnos:
-Cuando María dejó al bebé en el pesebre, Jesús me miró y me preguntó si yo tenía un lugar para estar. Yo le dije que no tenía mamá, ni papá y tampoco un lugar donde quedarme.
Entonces Jesús me dijo que yo podía quedarme allí con Él, pero le dije que no podía, porque no tenía un regalo para darle.
Entonces se me ocurrió que un buen regalo podría ser darle calor.
Por eso le pregunté a Jesús: -Si te doy calor, ¿Ese sería un buen regalo para ti?
Y Jesús me dijo: -Claro que si, ese sería el mejor regalo que me podrías dar.
Por eso que me metí dentro del pesebre y me acosté a Su lado para darle calor, en ese momento Jesús me miró y me dijo que podía quedarme allí para siempre.
Cuando el pequeño Yakim terminó su historia, sus ojitos brillaban llenos de alegría y de emoción como si ese pensamiento se hubiera transformado en realidad. Puso sus manos sobre su cara y lloro con un sentimiento muy profundo, porque por primera vez había encontrado a alguien que jamás lo abandonaría, ni abusaría de él. Alguien que le brindaría un amor incondicional y estaría con él para siempre.
Gracias a Yakim, aprendí una lección que jamás olvidaré y que además todos podemos vivir, sin necesidad de haber sido huérfanos, abusados, ni abandonados.
«Por muy confortable y cómodamente que vivamos. Aunque estemos, rodeados de nuestros seres queridos, de amigos y seamos amados, apreciados y respetados; todos sin excepción necesitamos estar al lado de Jesús para compartir ese calor a través del cual recibiremos amor, paz, aceptación y sobre todo, encontraremos nuestro lugar en el escenario de la vida»
¡¡Feliz Navidad!!

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