El cuerpo como todo lo demás, es un reflejo de nuestros pensamientos y creencias. Nos está hablando siempre, si le prestamos atención podemos escucharlo.
Todas y cada una de nuestras células reaccionan a cada uno de los pensamientos que tenemos y las palabras que decimos.
Para eliminar permanentemente un trastorno de salud, primero es necesario trabajar en disolver la causa mental. El síntoma es sólo un efecto externo. Los pensamientos o actitudes mentales que causan la mayoría de las enfermedades del cuerpo son los de la crítica. Rabia, resentimiento, culpa. Por ejemplo, la crítica suele conducir a enfermedades como la artritis, la rabia se convierte en cosas que infectan el cuerpo, el resentimiento guardado por mucho tiempo pudre y corroe a nuestro ser interno y puede finalmente conducir al cáncer; el sentimiento de culpa busca castigo y conduce al dolor y al sufrimiento. Es muchísimo más fácil liberar a la mente de estas formas negativas de pensar cuando estamos sanos que tratar de eliminarlas cuando estamos aterrados por una enfermedad o con un dolor constante. Sin reprocharnos ni sentirnos culpables por estas formas de pensar, necesitamos trabajar en cambiarlas para evitar crearnos enfermedades en el futuro.
Es necesario que atendamos y escuchemos con amor los mensajes que nos envía nuestro cuerpo. Es un acto de amor cuidar de nuestro cuerpo, brindarle los alimentos que necesita, hacer ejercicios. Es necesario que cuidemos, mimemos, y respetemos ese maravilloso templo en que vivimos. Podemos cuidar de nosotros mismos y estar sanos durante mucho tiempo.
Es hora de recuperar nuestro poder, el que hemos entregado a las industrias médicas y farmacéuticas. La medicina de alta tecnología ,que es cara y muchas veces destruye la salud, nos ha llevado de aquí para allá; ha llegado el momento de que todos aprendamos a estar al mando de nuestro propio cuerpo y nos creemos una buena salud. Cuando entendamos la relación mente –cuerpo desaparecerán la mayoría de nuestras enfermedades.
AFIRMACIONES PARA SUPERAR LA ENFERMEDAD
Atraigo a mi vida todo lo que necesito para sanar.
Participo en mi proceso de curación con alegría.
Amo mi cuerpo.
Escucho los mensajes de mi cuerpo.
Cada célula de mi cuerpo es amada.
Doy a mi cuerpo lo que necesita en todos los aspectos para proporcionarle una salud óptima.
Expreso la alegría de vivir y me permito disfrutar totalmente de cada momento del día.
Fácil y cómodamente me libero de lo que ya no necesito en mi vida.
Dejo ir el modelo mental que crea esto. Estoy en paz .Soy digno y valioso.
Soy una expresión divina de la vida. Me acepto y me amo tal como soy.
Abro mi corazón sólo para crear relaciones armoniosas.
La vida es eterna y está llena de júbilo.
Mi cuerpo es mi hogar
LOUISE HAY
