Aunque todas las personas en algún momento de la vida nos vemos en la obligación de enfrentar algún tipo de problema o circunstancia difícil, no todas las personas suelen abordar los problemas del mismo modo.
Elige la respuesta que más te identifique a la hora de abordar un problema y descubre el mensaje que hoy tenemos para ti.
1. Quejarme: Las personas que se quejan cuando aparece algún problema, generalmente están intentando llamar la atención de los demás porque a nivel inconsciente se sienten incapaces de afrontar la situación por sí mismos. Si eres de las personas que emiten quejas frente a los problemas debes saber que cada persona tiene problemas de acuerdo a sus posibilidades para resolverlos, por lo tanto, siempre serás más grande que tus dificultades y siempre tendrás las herramientas y el talento suficiente para solucionarlos. Es tu fuerza de voluntad y tus ganas de salir adelante lo que marcará la diferencia.
2. Paralizarme y pensar que no puedo: Esta es una típica acción de aquellos que buscan una excusa para la no acción. El miedo frente a las dificultades te paraliza y te impide aprovechar todo tu talento y energía para superarlas, además un problema será tan grande o tan pequeño como el miedo que le tengas. Tu principal reto es confiar más en ti y recordar que siempre hay una solución para cada problema, una alegría para cada lágrima y un abrazo para cada tristeza. Avanza con paso firme y da lo mejor de ti cada día, recuerda que una persona positiva convierte sus problemas en retos, nunca en obstáculos.
3. Buscar otros culpables: Cuando buscas culpables fuera de ti, automáticamente regresas a la infancia. Debes de comprender que la vida es una escuela y que las dificultades no son más que la manera en que el universo nos presenta aquello que debemos de aprender para nuestro despertar. Cuando niegas los problemas, te niegas a la enseñanza que está implícita en ellos y obligas a la vida a que te repita las lecciones una y otra vez. Por esta razón tu principal reto es aceptar que los problemas son lecciones que van y vienen, pero lo que aprendes de estos es para toda la vida.
4. Resistirme y negarlos: Vivimos en un mundo de dualidad y así como está el día está la noche, como está el frío también está el calor y como está la alegría también está la tristeza. Negar de manera obstinada las dificultades no te hará más feliz. Probablemente te dará alivio temporal, pero en el fondo todos sabemos que es imposible ocultar el sol con un dedo y que los problemas, por más que lo queramos, no se resuelven por sí solos. Es muy probable que tu naturaleza sea alegre y optimista, y por esta razón, la invitación para ti es que en lugar de evadir y pensar negativamente en los problemas, escoge mantener una actitud positiva para poder ver las soluciones y crecer hacia una vida plena y auténticamente feliz.
5. Aceptarlos y solucionarlos: Cuando aceptas tus dificultades y las afrontas con valentía, desarrollas tus habilidades y creces hacia una vida más próspera y más feliz. Y aunque en algún momento tengas muchas preguntas y dudas, recuerda que solo se entiende la vida en retrospectiva y muy pronto te darás cuanta que todo lo que sucedió tenía un propósito para ti. Por último, recuerda siempre que ser feliz es una decisión que hay que tomar cada día, que no depende de las condiciones de la vida que uno tenga, sino de la actitud con la cual enfrentas las dificultades.
Fuente: http://www.serfelizesgratis.org/
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