domingo, 23 de septiembre de 2012

MISERICORDIA




Una energía divina, a la que podemos llamar misericordia, eleva al ser humano hasta niveles que son inaccesibles en los procesos normales de la ley del karma. Esa poderosa y sabia energía fluye en la oración desinteresada y pr
oporciona cura, armonía y liberación.
A pesar de que, a través del tiempo, al término misericordia se le ha agregado una fuerte carga emocional, cuando se lo aplica en su significado más puro, designa a la energía que cura y transforma los niveles materiales, humanos y psicológicos. Gracias a la misericordia divina, saldos kármicos positivos que "permanecían archivados", pueden modificar situaciones y proporcionar oportunidades más favorables para el desarrollo de la consciencia.
Esa misericordia es la respuesta del mundo interior a una necesidad del ser humano, de la humanidad o del planeta. Cuando una persona, por ejemplo, hizo todo lo que estaba a su alcance para avanzar en el camino de la liberación, pero no puede superar la limitación de sus cuerpos materiales, la misericordia divina se le revela. Es una energía que proviene de niveles espirituales y constituye la base del perdón. Caracteriza la continua ayuda que las Jerarquías* ofrecen a los seres humanos, a pesar de que ellos hayan respondido poco a sus estímulos al progreso.
La mayor equivocación de quien se aleja de la Ley es juzgar su error mayor que la misericordia divina, no disponiéndose así a recibirla.
Jerarquías: Consciencias que trascendieron las leyes materiales y subieron los sublimes escalones de la existencia espiritual. Como un cuerpo unificado y cohesionado transmiten, a los habitantes del universo donde actúan, las orientaciones para el cumplimiento del propósito evolutivo.

Fuente: del libro "Más allá del Karma" – Trigueirinho

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