Las vitaminas se dividen en dos categorias. Las solubles en grasa y las solubles en agua.
En esta primera parte hablaremos de las solubles en grasa o liposolubles. Entre estas, se encuentran las vitaminas A,D,E y K. Estas se almacenan en el cuerpo y son utilizadas cuando es necesario.
Vitamina A - Ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, mejora la vision y es eficaz para combatir el cáncer del pulmón, laringe y vejiga. Existe evidencia de que la vitamina A es el agente que reduce la multiplicación de células malignas. Ademas, evita varios tipos de dolencias en la piel y ayuda a combatir los efectos del envejecimiento.
Que frutas la contienen:
La zanahoria,que contiene la mayor cantidad de vitamina. También el albaricoque, El durazno, y el melón.
Otras fuentes: La espinaca, la calabaza, las hojas de remolacha, el tomate, la col, el repollo entre otras.
Vitamina D
Es fácil de obtener porque es producida por la piel cuando estamos expuestos al sol. En este caso, es prudente en horas adecuadas para no danar la piel. Esta vitamina es responsable del fortalecimiento de los huesos y dientes, ademas de ayudar al organismo a absorber calcio. La falta de vitamina D en el cuerpo humano contribuye al reumatismo y acelera el proceso de fractura de huesos en las personas mayores, desencadenando la osteoporosis. También es causante del raquitismo en caso de su ausencia.
Vitamina E
Actúa como antioxidante, previniendo disturbios cardiovasculares y neurológicos. Impide que se afecten muchas células, cuando ocurre un corte en la piel, actuando para que los músculos cardíacos se mantengan lubricados y, ademas, reforzando el cuerpo contra algunos efectos de la contaminación ocasionada por el medio ambiente. La vitamina E se encuentra en algunas verduras de hojas verdes, como la zanahoria, la remolacha, la mora, el apio entre otros.
Vitamina K
Ayuda en la coagulación de la sangre y en el fortalecimiento de los huesos. Pero, estudios científicos han demostrado que el uso indiscriminado de esta vitamina, puede inducir a la formacion de algunos tipos de cáncer, entre estos, pulmón, ovario y seno.
Los tratamientos con antibióticos tienden a a disminuir la cantidad de vitamina K en nuestro cuerpo. Para obtenerla, debemos consumir cereales, ademas de hortalizas y verduras de hojas, ya sea en su forma natural o en jugo
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